En 2018, el Gobierno gastó tan solo el 46,8% del presupuesto destinado a investigación, desarrollo e innovación (I+D+i). En este sentido, de un total de 7.003 millones de euros de presupuesto público para I+D+i, se invirtieron 3.278 millones, por lo que el sector público estatal dejó de ejecutar uno de cada dos euros destinados a la I+D+i.
A pesar de estos datos, el aumento de la tasa de ejecución ha aumentado ligeramente en comparación con las cifras registradas en 2017, ya que ha pasado del 46,6% al 46,8% actual. Estas dos décimas suponen un incremento de 238 millones de euros, la primera mejoría desde 2013.
Esta información ha sido publicada por la Fundación Cotec, según los datos de la Intervención General del Estado (IGE).
La partida de Investigación, Desarrollo e Innovación ha sido la que registra la segunda peor tasa de ejecución presupuestaria entre todas las políticas del sector público estatal.
En 2018, la partida de I+D+i, junto a Comercio, Turismo y Pymes, han sido las únicas que han registrado una tasa de ejecución por debajo del 75% (46,8% y 43,4%, respectivamente).
Las inversiones realizadas en partidas como la investigación y el desarrollo (I+D) se traducen en grandes avances para los sectores productivos de un país. Para ello, es fundamental generar conocimiento con el objetivo de mejorar la productividad de las empresas y poder desarrollar nuevos o mejorados productos y servicios.
Por todo ello, es necesario incrementar la tasa de ejecución en la I+D+i española en los próximos años.